Cómo los trabajadores del sexo pueden protegerse del VIH

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Por: Ann Avery, médica de enfermedades infecciosas de Metrohealth Medical Center.

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Queremos empezar este blog diciendo que no estamos aquí para juzgarte a ti ni a tu decisión de ejercer el trabajo sexual. Confiamos en que, mientras seas adulto y tomes la decisión por ti mismo, sin presiones externas, sea una decisión adecuada para ti en este momento.

No estamos aquí para sermonearte sobre los peligros del trabajo sexual. De todas formas, tú los conoces mucho mejor que nosotros. Pero los estudios han revelado que los trabajadores del sexo tienen 10 veces más probabilidades de contraer el VIH, por lo que queremos darte los conocimientos y las herramientas que necesitas para protegerte.

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Haz lo que sea necesario para cuidarte

Lo haces para ganar dinero, pero te animamos a que tu prioridad sea siempre tu seguridad.

Siempre que puedas, intenta trabajar con un compañero. Cuídense las espaldas mutuamente. Informa a tu compañero de con quién vas y dónde estarás.

Es una buena idea establecer las condiciones con tu cliente antes de subir a un auto, entrar en una habitación de hotel o quedar en un lugar nuevo. ¿Cuál es tu precio? ¿Cuándo te pagarán? ¿Qué esperan obtener a cambio? ¿Usarás preservativo? Esta puede ser una conversación potencialmente peligrosa, por lo que puede ser una buena idea acabar con ella antes de que se quiten la ropa y cuando definitivamente tengas una salida si la necesitas.

Los preservativos son ideales, pero puede que no los quieras o que no puedas confiar en que tus clientes quieran usarlos. Pero no pasa nada. Tienes opciones para mantenerte a salvo del VIH y otras ITS.

En primer lugar, puedes someterte a la PrEP (profilaxis previa a la exposición). Es una píldora diaria que reducirá considerablemente tu riesgo de contraer el VIH. Haz clic aquí para consultar nuestro blog sobre la PrEP y luego habla con tu médico.

En segundo lugar, puedes utilizar un preservativo interno. Estos preservativos pueden introducirse en el ano o la vagina con antelación, para que estés preparado cuando llegue el momento. Puedes leer todo sobre ellos en nuestro blog aquí.

Si utilizas un preservativo interno, te recomendamos que se lo digas a tu cliente de antemano. Puede que no sea buena idea sorprenderle con ello: nunca se sabe cómo reaccionará.

Y siempre tienes otras opciones para servir al cliente mientras te mantienes seguro. Masturbación, sexo oral, coito interrumpido: prueba todo lo que puedas antes de dejar que su semen toque el interior de tu ano o vagina. No son perfectas, pero pueden reducir mucho el riesgo.

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¡Mantente sano! ¡Tú lo vales!

La atención médica es un derecho, no un privilegio. Tienes derecho a recibir la atención médica adecuada que necesites.

Hacerte la prueba del VIH y otras ITS con regularidad es una cosa importante que puedes hacer para mantenerte sano. En general, recomendamos que te hagas la prueba cada tres meses aproximadamente, pero puede que quieras hacértela más a menudo. Y no te preocupes: hay muchos lugares donde puedes hacerte las pruebas gratuitamente con la frecuencia que necesites. Visita la sección «Recursos» de nuestro sitio web si vives en Cleveland para encontrar clínicas gratuitas en la ciudad.

Si das positivo, ¡que no cunda el pánico! Puedes trabajar con tu magnífico equipo de profesionales médicos para empezar el tratamiento de inmediato. Y ya sabes que también tenemos un blog sobre eso.

Si eres trans, no dejes que nadie te diga que eres diferente de los demás. Mereces la misma asistencia médica de alta calidad que cualquier otra persona. Y si vives en Cleveland, ¡estás de suerte! La Clínica LGBT Pride de MetroHealth, ubicada en 4242 Lorain Ave., puede ayudar a satisfacer todas las necesidades médicas de los pacientes LGBTQ, desde terapias hormonales hasta pruebas del VIH. Hay aún más opciones disponibles en la sección «Recursos».

Cuando estés preparado para dejar el trabajo sexual

No estamos aquí para convencerte de que dejes esa vida. Es tu elección. Pero si estás preparado para dejar el trabajo sexual, o cuando lo estés, hay personas y organizaciones que pueden ayudarte.

A menudo hay otros factores que te llevan al trabajo sexual, tal vez porque creías que no podrías encontrar un trabajo tradicional. Pero ¿adivina qué? Tienes aptitudes para los negocios, determinación y ética de trabajo: todo el mundo que ofrece un empleo quiere estas cualidades en sus empleados.

Si vives en Cleveland, el Renee Jones Empowerment Center en West 65th es un gran recurso. Además de terapia y apoyo social, ofrecen habilidades para la vida y capacitación laboral a las personas que han ejercido el trabajo sexual y/o han sido víctimas del tráfico sexual.

Si eres transgénero, MetroHealth organiza cada primavera una feria de empleo en la que participan empresas locales que contratan a empleados transgénero. ¡Tú puedes obtener ese trabajo de horario laboral!

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¿No te dedicas al trabajo sexual? Igual puedes ayudar a hacerlo más seguro

Aunque no seas un trabajador del sexo o alguien que utilice sus servicios, puedes contribuir a que el trabajo sexual sea más seguro para todos y reducir así el riesgo de infección por VIH.

Las leyes que penalizan el trabajo sexual pueden tener buenas intenciones, pero en realidad lo hacen mucho más peligroso para todos los implicados. Estas leyes empujan la práctica a la clandestinidad, dificultando a los trabajadores del sexo la selección de nuevos clientes, la negociación de condiciones como el precio y el uso del preservativo y la búsqueda de ayuda de la policía si las cosas van mal. También significa que los trabajadores del sexo a menudo tienen problemas para acceder a una atención médica adecuada, incluyendo el tratamiento del VIH.

Estas leyes también contribuyen a estigmatizar aún más a los trabajadores del sexo, y si vives con VIH, sabes lo poderoso que puede ser el estigma.

Algunos estudios demuestran que despenalizar el trabajo sexual no solo ayuda a proteger a los trabajadores del sexo y les permite participar plenamente en la economía, sino que también puede ayudar a aumentar el acceso y el uso de preservativos. De hecho, expertos de todo el mundo creen que despenalizar el trabajo sexual es un paso necesario en la prevención del VIH.

Entonces, ¿qué puedes hacer para ayudar?

1. Infórmate sobre cómo la despenalización del trabajo sexual puede ayudar a proteger a los trabajadores del sexo y a sus clientes y a prevenir una mayor propagación del VIH. Amnistía Internacional tiene una excelente sección de preguntas y respuestas sobre por qué está a favor de la despenalización.

2. ¡Involúcrate! Hay algunas organizaciones estupendas dedicadas a hacer del trabajo sexual una experiencia más segura. Nos encantan organizaciones como Sex Workers Outreach Project USA. Esta organización se dedica a defender los derechos humanos de los trabajadores del sexo, a disminuir la violencia contra ellos y a acabar con el estigma mediante la educación y la promoción. Hay delegaciones de SWOP en todo el país, pero aquí en Cleveland todavía no hay ninguna. ¿Por qué no fundar una?


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