Por Jennifer McMillen Smith, MSSA, LISW-S, División de Enfermedades Infecciosas, y revisado medicamente por Ann Avery, médica de enfermedades infecciosas de Metrohealth Medical Center.
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Algunos adultos que viven con VIH nunca se lo dicen a sus padres. No quieren que sus papás estén siempre preocupados por ellos.
Saber si debes decírselo a tus padres puede ser más complicado si eres adolescente.
¿Por qué?
Porque tus padres son responsables de tu salud. Si tienen un seguro médico que te cubre, el seguro podría ayudar a pagar el coste de tu tratamiento.
Pero saber esto no hace que sea fácil decírselo.
Es comprensible que dudes en decírselo a tus padres porque no quieres que se preocupen por ti.
Otros sienten que sus padres no aceptan su orientación sexual, lo que hace que la idea de compartir tu estado serológico sea difícil.
Solo tú puedes tomar esta decisión.
La buena noticia es que hay formas de facilitar la respuesta a esa pregunta:
- Habla con un orientador de la clínica donde te hiciste la prueba. Pregúntales qué han hecho otras personas como tú y cómo lo hicieron.
- Habla con otros jóvenes seropositivos y pregúntales qué hicieron. No eres la primera persona que se enfrenta a este problema. Tu consejero o asistente social debería poder ponerte en contacto con un grupo de apoyo para otros adolescentes que viven con VIH. Asiste a sus reuniones y pregúntales qué hicieron. Y pregúntales cómo reaccionaron sus padres.
- Pregúntate cómo reaccionarían tus padres ante este tipo de noticias. Si crees que se lo tomarán a mal y empezarán a gritarte, te echarán de casa o se pondrán violentos, puede que decírselo tú mismo no sea lo mejor.
Pero entonces, ¿cómo reaccionarían si se enteraran por otra persona?
Vale, eso ha sido un poco deprimente, ¿no? Así que esperemos un segundo y aclaremos una cosa:
Muchos padres apoyan totalmente a sus hijos cuando se enteran de que uno de ellos vive con VIH. Les ayudan a encontrar médicos, a recibir tratamiento y a averiguar cómo pagarlo. Y no juzgan a sus hijos porque lo hayan contraído. Dicen: «Lo que pasó, pasó, ¿vale? ¿Cómo sacamos lo mejor de ello?».
Esta es una forma de decirles a tus padres que vives con VIH
Los músicos que escuchas no se inventan las cosas que cantan y tocan sobre la marcha. Escriben letras, leen música, memorizan sus partes y las ensayan antes de grabar o tocar delante de un público.
Pues bien, piensa que tus padres son tu público y empieza a escribir algunas notas para darles la noticia.
No tienes por qué ponerlo por escrito, pero deberías pensar en la mejor manera de decírselo, y luego practicar unas cuantas veces hasta que te sientas bastante cómodo sabiendo lo que tienes que decir.
Entonces, ¿qué deberías decir? Piensa en cómo reaccionaste cuando supiste que eras seropositivo. Al principio te asustaste, pero cuanto más aprendías sobre los tratamientos del VIH, más te calmabas y te dabas cuenta de que podías vivir una vida larga y sana y que todo iría bien.
Descubriste que hay medicamentos disponibles, y que hay programas que garantizan que puedas conseguir tus medicinas aunque no ganes mucho dinero.
Puede que tus padres no sepan nada de esto. Tienes que ser tú quien se los explique todo.
Claro que será duro para ellos. Pero eres tú quien tiene que vivir con tu diagnóstico.