Por: Ann Avery, médica de enfermedades infecciosas de Metrohealth Medical Center.
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Si crees que puedes correr el riesgo de infectarte por el VIH, pero aún no estás infectado, necesitas conocer la PrEP.
La PrEP es el uso una vez al día del medicamento Truvada por parte de una persona seronegativa para reducir significativamente sus posibilidades de infectarse por el VIH. Si se toma según lo prescrito, la PrEP tiene una eficacia demostrada de hasta el 99% en la prevención de la infección por VIH.
El candidato más obvio para la PrEP es una persona seronegativa con una pareja seropositiva.
Otros candidatos a la PrEP son:
- Hombres que hayan practicado sexo anal sin protección con otros hombres en los últimos seis meses o que hayan contraído una infección de transmisión sexual en el pasado.
- Cualquiera que no esté seguro de los hábitos e historiales sexuales o de consumo de drogas de su pareja actual, pero que tenga una razón de peso para sospechar que su pareja podría vivir con el VIH o estar expuesta a él.
- Consumidores de drogas inyectables que comparten agujas.
- Cualquier persona con múltiples parejas sexuales y/o que comparten drogas, especialmente si se desconoce el estado serológico respecto al VIH de las parejas.
- Personas que intercambian sexo por dinero, alojamiento, comida y/u otros servicios.
Si perteneces a alguno de estos grupos, deberías hablar inmediatamente con tu médico sobre la PrEP. Si se toma correctamente, la PrEP puede reducir tu probabilidad de infectarte hasta en un 99%.
Cómo funciona la PrEP
PrEP es la abreviatura de «profilaxis previa a la exposición». Previa a la exposición significa que la tomas antes de haberte expuesto al VIH. Si ya tienes el VIH, tendrás que tomar medicamentos diferentes.
Si alguna vez has oído llamar «profiláctico» a un preservativo, ya tienes una idea de cómo funciona la PrEP. Para decirlo sin rodeos, la PrEP es como un preservativo para tu sistema inmunológico.
No es un tubo de látex como los que utilizas para mantener relaciones sexuales más seguras e inteligentes. Es una barrera química que los científicos diseñaron para una tarea específica: proteger determinadas células del sistema inmunológico contra los ataques del VIH. No protege de ninguna otra ITS, solo del VIH.
El efecto de la PrEP
El VIH secuestra las células T CD4 que el sistema inmunológico necesita para combatir las infecciones. Una vez que el VIH se apodera de una célula CD4, hace un montón de copias de sí mismo y luego mata a la célula CD4. Después, todas esas copias del VIH van en busca de más células CD4 que secuestrar y matar.
Si las células CD4 no tienen protección contra el VIH, el virus puede hacer miles de millones de copias de sí mismo y causar una infección.
La PrEP utiliza un par de sustancias químicas que impiden que el VIH se adhiera a las células CD4. Funciona como una armadura para proteger a esas adorables células CD4. Si el VIH no puede entrar en las células CD4, no puede propagarse ni convertirse en una infección.
Qué no es la PrEP
Ahora que sabes lo que es la PrEP, tienes que entender lo que no es.
- No es una cura para el VIH.
- No es una vacuna contra el VIH.
- No sustituye al preservativo en las relaciones sexuales.
- No es para las personas que ya tienen el VIH.
- No es un pase libre para adoptar comportamientos de riesgo.
Consideraciones importantes sobre la PrEP
- La PrEP debe tomarse una vez al día, todos los días. Su eficacia disminuye si no la tomas regularmente según las indicaciones.
- La PrEP debe acumularse en tu cuerpo durante al menos una semana antes de que sea efectiva para el sexo oral y anal y al menos tres semanas para el sexo vaginal.
- Tienes que someterte a la prueba del VIH antes de empezar con la PrEP y tienes que acudir al médico cada tres meses mientras la estés tomando para que te haga algunas pruebas y te la vuelva a recetar.
- El medicamento utilizado para la PrEP se llama Truvada. Si no tienes seguro, es muy probable que necesitarás ayuda para pagarlo y esa ayuda está disponible. Si tienes un seguro con cobertura de medicamentos recetados, es muy probable que lo cubra, pero existen otras formas de asistencia disponibles para ayudar a complementar esa cobertura si cumples los requisitos.
La PrEP no es una panacea. Al fin y al cabo, ni siquiera es una cura. Si puedes estar en riesgo de contraer el VIH, la PrEP es una herramienta de prevención importante y emocionante que puedes añadir a tu cinturón de herramientas para el sexo seguro.
Habla con tu médico y pregúntale si la PrEP es una buena opción para ti.