Por Jennifer McMillen Smith, MSSA, LISW-S, División de Enfermedades Infecciosas, y revisado medicamente por Ann Avery, médica de enfermedades infecciosas de Metrohealth Medical Center.
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No hay una forma fácil de decirle a tu pareja que eres seropositivo. Solo tienes que elegir la forma que te parezca mejor.
Algunas situaciones son más fáciles que otras. Digamos que conoces a alguien en una fiesta o en un bar y ahora se están preparando para tener relaciones sexuales. En esos casos, solo tienes que detenerte y decir: «Antes de hacerlo, tengo que decirte que soy seropositivo». Esto no es solo lo correcto: en algunos estados, te pueden acusar de un delito por no revelar tu estado serológico. Si tu nuevo amigo se va, al menos sabrás con qué tipo de persona estabas tratando. Es mejor enterarse pronto que tarde y, de todos modos, te mereces algo mejor.
Pero ¿y si ya tienes pareja o no buscas solo ligar? A veces la gente da positivo en la prueba del VIH y tiene dificultades para darle la noticia a su pareja, a la que quiere y por la que se preocupa. A veces puede resultar complicado, pero esperamos que estos consejos te ayuden:
1. Infórmate
Aprende todo lo que puedas sobre el VIH: las causas, los tratamientos, los efectos secundarios de los medicamentos y los recursos como clínicas y grupos de apoyo para el VIH. Cuanto más aprendas sobre el VIH, más seguro estarás de que tu diagnóstico es un problema con el que puedes lidiar. No es algo por lo que tú y tu pareja tengan que romper.
Obviamente, nadie quiere el VIH. Pero sabemos cómo tratarlo y controlarlo. Además, tomar medicamentos para el VIH y seguir tomándolos para que tu carga viral se mantenga indetectable hace que sea muy poco probable que transmitas el virus a otra persona. ¡Indetectable = intransmisible!
Y para las parejas que quieran más tranquilidad, la PrEP es una opción estupenda para protegerlas de cualquier posibilidad de infección accidental por el VIH.
Conocer estos hechos de antemano puede darte la confianza que necesitas para asegurarle a tu pareja que no hay nada de lo que asustarse y que pueden superarlo. También demuestra lo maduro que eres y lo mucho que te preocupas por él/ella. 🙂
2. Prepara tu cerebro para una conversación difícil
Piensa en cómo suele reaccionar tu pareja ante las malas noticias. ¿Aumenta el dramatismo, se pone histérico y tiende a asustar a la gente? ¿Reacciona con calidez, compasión, tranquilidad y apoyo? ¿Necesita tiempo para procesar las cosas o las afronta rápidamente?
Ahora bien, si has salido y te has infectado con otra persona y tu pareja no lo sabe, es posible que estés lidiando con sentimientos de traición más fuertes que los sentimientos de tu pareja sobre tu estado serológico.
La traición es difícil de superar porque daña la confianza entre personas que se quieren. Así que, si se trata de una traición, prepárate para una reacción negativa de tu pareja. Ambos pueden superar estos sentimientos, pero a veces pueden enfriar seriamente su relación.
Sea cual sea la situación, suele ser buena idea estar preparado. Ponte en el lugar de tu pareja. Cuanto más preparado estés, más fácil te resultará manejar lo que ocurra.
3. Programa una cita para anunciar la noticia
Busca un lugar tranquilo donde no los molesten y fija una cita para verse allí. Si sospechas que tu pareja reaccionará mal, puede ser bueno que sea una zona pública que desaconseje una gran escena dramática que puedan ver otras personas.
Programar una cita en una hora y un lugar concretos indica a tu pareja que se va a hablar de algo importante. Y te da un margen de tiempo para poder prepararte.
4. Da la noticia con calma y cuidado
Cuando empieces, puedes considerar empezar con algo básico del tipo «Tengo que decirte algo importante».
Luego entra en tu mensaje lenta y deliberadamente. Guíale por el proceso de cómo te hiciste la prueba y supiste que eras seropositivo. Cuéntale cómo te sentiste. Habla de toda la información que has recibido. Insiste en que el VIH es fácilmente tratable y que muchas parejas en situaciones como esta no tienen problemas para mantener su relación y su vida sexual. Al fin y al cabo, no hay por qué temer al VIH si recibes el tratamiento adecuado.
5. No esperes milagros
Una pareja que te quiera debería ser capaz de aceptar tu estado serológico y comprometerse a apoyarte pase lo que pase.
Pero la gente no siempre puede hacer lo correcto de inmediato. Tu pareja podría preguntarse «¿qué significa todo esto para mí?». Su reacción puede parecerte egoísta, pero, de nuevo, ¿reaccionarías quizá de la misma manera si las situaciones fueran a la inversa? Con un poco de tiempo para procesar la noticia y algo de apoyo paciente por tu parte, algunos aceptarán tu estado y te colmarán de amor. Otros puede que nunca lo acepten, lo cual duele, pero a pesar de todo estarás mejor sin alguien así. En la salud y en la enfermedad, en los buenos y en los malos momentos... ¡eso es lo que te mereces!
6. Mira hacia delante, no hacia atrás
No puedes viajar atrás en el tiempo para evitar contraer el VIH. Pero puedes afrontar el camino que tienes por delante con valentía y determinación. La pareja adecuada quiere recorrer ese camino contigo.
Si decírselo a tu pareja pone fin a su relación, que así sea. Sabemos que duele y no pasa nada por necesitar tiempo con ese dolor. Solo tienes que saber que estarás bien. Es mucho mejor dejar marchar a una pareja que te abandonaría en un momento así, levantarte y volver a vivir tu hermosa vida.